Quizas sea porque este año hace bastante menos calor que el pasado o porque por la zona en el mes de Mayo ha llovido bastante más de lo habitual y predecible. Eso a conseguido que durante mas de un mes el agua desembalsada en la desembocadura aumentará considerablemente el nivel de agua dulce y el aumento considerable de corrientes que provoca que las lisas o mujoles, se adentren mas hacia el rio en busca de remansos. Incluso especies habituales en la zona como las doradas han tardado en hacer aparición, o los mabres que siempre han sido habituales a fecha de Junio no dan la cara.
Mi compañero el Peña, columna dorsal de el Alguero Vega Baja |
A pesar de todo hay que probrar y en esta ocasion con mi amigo Peña nos disponemos a probrar suerte en un dia propicio. Esta pesca que es bastante de espera, siempre viene acompañada de una sesión de pesca a boya que da muchas alegris y esa eterna cañita que siempre pongo con una calavereta para tantear a las dodradas.
La jornada transcurre sin pena ni gloria, apenas un par de sarguetes a boya y una picada fallida que como coincidio con el ataque de una gaviota a uno de los mujoles vivos que teniamos no nos dimos cuenta. En fin, por lo menos empiezan a dar la cara ... de doradas ni rastro...
Pro la forma del bocado no era muy grande ... unos tres kilos |
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